Si usted corre peligro de ser deportado de EE.UU. debe saber que existen posibilidades de cancelar el proceso. Sin embargo, los requisitos para que esto ocurra cambiarán drásticamente dependiendo de si usted es un residente permanente o no. A su vez, es importante distinguir también requisitos entre residentes no permanentes que fueron víctimas de violencia doméstica de los que no.
Residentes permanentes legales
Aquellos que cuentan con residencia permanente legal en los EE.UU. también pueden correr riesgo de ser deportados por ciertas causas. Si usted es un residente permanente legal enfrentando una posible deportación, deberá cumplir con estos requisitos para solicitar la cancelación de la remoción:
- Ha sido residente permanente legal por al menos cinco años
- No ha sido condenado por ningún delito agravado
- Ha vivido continuamente en Estados Unidos por al menos siete años después de haber sido admitido legalmente
Residentes no permanentes
Si usted es un residente no permanente, se le podría otorgar la cancelación de deportación si:
- Ha estado físicamente presente en el país por diez años al menos
- Puede demostrar que su deportación causaría extremas dificultades para sus familiares inmediatamente cercanos (cónyuges, hijos y padres)
- Demuestra haber sido una persona de “buen carácter moral”
- No ha cometido ninguna ofensa que lo haga “deportable”
Residentes no permanentes víctimas de violencia doméstica
Si usted sufrió tratos de extrema crueldad perpetrados por un padre o cónyuge ciudadano o residente permanente en EE.UU. podría solicitar la cancelación de su deportación fundándose en ello. Deberá demostrar que:
- Ha sido una persona de “buen carácter moral”
- Ha estado presente de manera continua en el país por al menos 3 años
- No ha cometido ninguna ofensa que le considere “deportable”
- Merece un veredicto positivo de parte del juez
- Su deportación causaría extremas dificultades a ciertos familiares inmediatos o a sí mismo
Cabe destacar que la definición de “extremas dificultades” es bastante ambigua. En definitiva, quedará a discreción del juez de inmigración analizar su caso particular para tomar su decisión.
Recuerde que recibir un aviso para comparecer ante un juez de inmigración no tiene que ser el fin de su residencia en Estados Unidos.
La cancelación de deportación no es la única defensa legal (enlace en inglés) con la que usted podría contar. Lo que se conoce técnicamente como la cancelación de deportación, es un remedio jurídico para aquellos que han vivido muchos años en el país y tienen lazos con la comunidad.
Aun si este no es su caso, pueden existir otras soluciones para quedarse en Estados Unidos como, entre otros, solicitar permanecer como asilado, pedir ajuste de estatus, o aplicar para beneficios de la ley DACA (para los llegados en la infancia) o programas para víctimas de violencia.